Pareciera que México está condenado a la mediocridad. El sistema educativo de nuestro país no cumple su objetivo como el medio por el que los mexicanos encuentren las herramientas que les ayuden a mejorar su calidad de vida con conocimientos que permitan mejores empleos con ingresos adecuados para las familias. “Brechas” de Mexicanos Primero, es un reporte independiente de personalidades brillantes y destacadas en el mundo del pensamiento y la comunicación.
Las cifras que encontraron son las siguientes:

• De 100 estudiantes que entran a la primaria solo 68 completan el esquema básico y 35 de ellos terminan la primaria
• 1 de cada 5 mujeres indígenas de entre 15 y 24 años de edad continúa sus estudios
• Solo el 8.5% de la población cuenta con una licenciatura
• Solo 3% de indígenas logran cursar por lo menos un año en la universidad

La finalidad del reporte Brechas ante los mexicanos es: “sacudirse la complacencia, llamar a una urgencia perseverante e invitar a la corresponsabilidad” , entre sus colaboradores se encuentran: Denisse Dresser, brillante analista político; Fernando Reimers director de política internacional educativa de Harvard; Leo Zuckermann, analista político.

El modelo educativo de nuestro país debe ser modificado y adaptado para poder lograr un crecimiento significativo. Sin embargo, la SEP ha entrado en el juego político de conveniencias y marchas, de suspensiones y flojera. A los maestros les importa más inmiscuirse en elecciones públicas que en asistir a sus clases y brindar el conocimiento que los alumnos necesitan, sin embargo, ante una no-suspensión gritan y vociferan alzando la voz para que se les respete sus derechos obteniendo puentes y suspensiones innecesarias.

El reporte Brechas nos demuestra cómo las desigualdades económicas y sociales afectan también  los estratos educativos, estas son las brechas que dividen a México del mundo así como a la sociedad, la inequidad del aprendizaje está relacionada con estas desigualdades económicas. Aquellos en quienes está concentrado el capital y que cuentan con acceso a educación de calidad ven de lejos la realidad de los que no tienen otra opción que asistir a estas “escuelas para pobres” que los preparan para ser sus empleados, aquellos que limpian su casa, los atienden en supermercados o lavan sus autos.

Suena cruel pero el sistema educativo SEP/SNTE tampoco se interesa por preparar a todos los mexicanos para quitarnos el estigma impuesto por nosotros mismos de trabajadores, empleados, mano de obra barata, como nos ve el resto del mundo, aquellos países con quienes se supone, debemos competir. Pero que llena sus puestos con gente corrupta dispuesta a vender sus votos, cobrar sueldos dobles, secretarias con plazas de maestras, directores que se hacen de la vista gorda ante injusticias cometidas por los maestros y tantas y tantas otras bellezas que convierten a nuestro país en un sistema de corrupción, delincuencia y mediocridad.

Lamentablemente, México es un país que está rodeado de gente acostumbrada a recibir las miserias que el gobierno lanza a cambio de votos, regalos que se dan a personas que apoyan a su partido que pueden ir desde trabajos en los ayuntamientos o dependencias políticas a personas que no tienen la capacidad ni los conocimientos para llenar el puesto.

Aún no es tarde para crear un cambio profundo, una reforma en la educación que aumente significativamente la calidad en el aprendizaje de las nuevas generaciones que aún pueden gozar de un país limpio de corrupción y crear una política justa para todos los ciudadanos, aunque tal vez esto sean solo quimeras…

Author: director