Con la rápida demanda poblacional que explota en los años 70´s, la prepa abierta se ha convertido en una opción para aquellas personas que o no se adaptan al sistema escolarizado típico de la educación en México o que simplemente no tienen tiempo de asistir con regularidad a las instituciones porque sus diversas actividades se los impiden.

El nivel medio superior en la educación representa un pilar fundamental en el pleno desarrollo de los individuos hacia un mejor estadío, por lo que en muchos estados de la República Mexicana la demanda se ha hecho cada vez más grande. En casi todos los planes de estudio de las diversas instituciones que ofrecen este servicio, se encuentran 33 asignaturas, de las cuales los alumnos los tres primeros semestres cursarán en el denominado “tronco común” que no se trata más que de asignaturas que se tienen que cursar por parte de todos los estudiantes, ya sea que decidan para su cuarto semestre cursar cualquiera de las 3 áreas que ofrecen estas escuelas: humanidades, ciencias sociales o físico matemático. Para poder llevar satisfactoriamente sus estudios, los alumnos cuentan con varios elementos como son las guías de estudio para cada materia y nivel, pláticas informativas (a las cuales se debe asistir de manera obligatoria ya que a través de estas es que el alumno se familiariza tanto con la institución como con los inmuebles) y bibliotecas especializadas en varios temas que sin duda serán de gran funcionamiento en la formación de los alumnos. Otro de los beneficios con los que cuenta la preparatoria abierta es que los alumnos no son abandonados, sino que los tutores se encuentran todo el tiempo al pendiente de los avances y dudas que puedan surgir.

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